martes, 23 de abril de 2019

Me dijeron que en el Reino del Revés...


Continuando con el post anterior, hoy aplico la metodología de planificación inversa para comenzar a crear el aula virtual para los estudiantes de Futuros Egresados, para acompañarlos en el cursado semi-presencial que diseñamos especialmente para quienes retoman sus estudios después de mucho tiempo y se encuentran como primera asignatura con Teoría del Estado y Políticas de Comunicación.

¿Me resultó difícil? ¿Me resultó sencillo? No se... creo que ni lo uno, ni lo otro.

Es una manera diferente de plantear el trabajo, más centrada en cómo se pueden lograr los resultados de aprendizaje que en los temas que se debe abordar. Es un ejercicio, un mirar las cosas desde otra perspectiva, que siempre resulta enriquecedor.

A mí me ha resultado útil para plantearme qué buscamos desde el espacio curricular en general y para el Plan Futuros Egresados en particular, para pensar cómo lograr tales resultados de aprendizaje, para centrar los esfuerzos en cómo desarrollar esos procesos de la mejor manera, para mirar más allá y plantear lo social como un resultado de aprendizaje fundamental, tan importante como los contenidos y su apropiación.

La planificación inversa me parece genial y, si no lo he hecho mal (lo que es probable), relativamente fácil y hasta... natural.

La voy a aplicar de aquí en adelante.

Les dejo el podcast de presentación.



jueves, 18 de abril de 2019


Ayudando a alcanzar grandes metas a partir de la virtualidad.



Armar un espacio virtual de aprendizaje especialmente diseñado para acompañar a estudiantes del Programa Futuros Egresados en la cursada semipresencial por evaluación continua que les proponemos desde la cátedra Teoría del Estado y Políticas de Comunicación, de la carrera de Comunicación Social, es un importante objetivo que me he planteado hace ya un tiempo.

Es, en parte, por eso por lo que me inscribí en este espacio formativo: para aprender y poder, en el segundo semestre, vincular a la cátedra con los estudiantes, y a ellos entre sí, a través de un espacio de enseñanza virtual efectivo.

El modelo ADDIE y su primera fase de Análisis me permiten comenzar a pensar seriamente en dicho espacio, reflexionando acerca de las características específicas de los estudiantes; los recursos necesarios y disponibles; el entorno y los medios a utilizar; el tiempo y los resultados de aprendizaje a que apuntamos.

En este sentido, me resulta muy sencillo identificar las principales características, fortalezas y necesidades de los estudiantes, ya que hace varios años que estoy muy unida a este Programa y me he encariñado y comprometido con cada uno de los estudiantes con los que he compartido.

Son adultos, de más de 25 años, que debido a diferentes situaciones, una enfermedad; haber comenzado a trabajar a tiempo completo; haber formado una familia; haber tenido una o varias malas experiencias en la Facultad, etc. han demorado su egreso, se han alejado durante un tiempo de sus estudios o han dejado los mismos, pero hoy deciden retomar su carrera al faltarles menos de 5 materias para finalizarla.

Los docentes que trabajamos en asignaturas del tramo final de la carrera nos hemos reunido con el Servicio de Apoyo y Orientación al Estudiante para acompañarlos y, cada uno a su manera y en base a sus posibilidades, ayudarlos a cumplir su gran objetivo: recibirse.

Estos estudiantes ha perdido y han ganado cosas en su impase. Han perdido compañeros de estudio; ritmo; confianza. Han ganado experiencia laboral; habilidades de organización y de aprovechamiento del tiempo y capacidad de esfuerzo.

Es por eso que los docentes tenemos que ayudarlos guiándolos; generando instancias de encuentro para que establezcan nuevos vínculos; secuenciando el proceso de estudio; escuchándolos y diseñando actividades didácticas que aprovechen su experiencia laboral y sus conocimientos y que sean posibles de llevar a cabo para quienes trabajan largas horas y/o tienen familia.

Por tales razones acompañar la cursada quincenal con un espacio virtual de aprendizaje resulta fundamental y motivante, ya que se vincula con los intereses y las habilidades tecnológicas y en redes sociales que poseen estudiantes avanzados de comunicación social.

En cuanto a los recursos necesarios, por experiencia conozco que los estudiantes disponen en general de teléfono celular o notebook, que pueden acceder en su casa, muchas veces en el trabajo y siempre en la Facultad a conexión a Internet y que muchos de ellos pueden usar los recursos tecnológicos de sus ámbitos laborales que cuentan con aplicaciones para grabar voz e imagen; para editar textos en diversos formatos; para editar videos, etc.

Asimismo la Facultad pone a disposición la plataforma UNCU Virtual que, si bien presenta limitaciones, puede utilizarse en las primeras experiencias.

Todo lo anterior hace no solo posible, sino necesario pensar en un aula virtual y actividades creativas, que ayuden a construir vínculos sociales y que permitan aplicar atractivamente los conocimientos a través de actividades que entusiasmen a los estudiantes y los impulsen a avanzar.

Si bien a futuro considero la posibilidad de elaborar actividades virtuales para la totalidad del programa, ayudando a completar las 75hs cátedra que debe implicar la asignatura, en un principio trabajaré en la unidad 1.

De esta forma los resultados de aprendizaje esperados se vinculan tanto con que los estudiantes aprendan los contenidos de la asignatura y puedan aprobarla al culminar el cuatrimestre, como con reforzar su autoestima; generar grupos de estudio y recuperar hábitos cognitivos que les permitan alcanzar su objetivo: terminar la carrera.

De manera gráfica el análisis puede sintetizarse de la siguiente manera.

Aquí el link de mi elevator pitch.



martes, 16 de abril de 2019

Innovo, luego existo.




Mis primeras reflexiones al leer mi clase memorable enriquecida fueron las siguientes.

"¡No me alcanza mi dedicación horaria para abordar las clases de esta manera... ni el cuatrimestre!"
"¡La cátedra atiende 120 estudiantes por cuatrimestre... y solo somos dos docentes!"
"¡No importa cuánta sea mi vocación y dedicación... no tendría vida!"
"Aunque actúe con la mayor motivación y entusiasmo... ¿lograré aplicar todas las teorías e innovaciones?"

Luego de enfrascarme en tales ideas negativas, que no son erradas, ni niegan la realidad, sino que son solo negativas, pasé a la etapa de positividad crítica.

Como cientista social estoy entrenada para reflexionar críticamente. Es parte del paquete y te programan durante la etapa estudiantil para hacerlo siempre y en cada ámbito. Por eso hoy lo pongo en práctica en esta entrada del blog.

Es cierto que sería prácticamente imposible abordar desde todas las teorías del aprendizaje y desde las miradas didácticas más activas y participativas cada clase, cada tema, cada unidad. Pero no es prácticamente imposible tratar de aplicar la teoría más adecuada y el enfoque didáctico más acorde a cada tema, buscando cierta variedad y mayor creatividad, que redunden en aprendizajes más efectivos y significativos para los estudiantes.

También es verdad que a lo anterior hay que hacerlo con criterio... y sentido crítico. Si por experimentar con las metodologías, teorías e instrumentos tecnológicos más actuales y variados se van a poder abordar solo unas pocas unidades del programa, o si se va a hacer más foco en las herramientas que en los contenidos, no creo que sea oportuno apartarse tanto, tanto, tanto de lo clásico y probado (o sea de los contenidos, la recepción y, en fin, el conductismo con cierta mirada de aprendizaje significativo y actividades prácticas divertidas y efectivas, bah... la mediación docente de toda la vida). Demonizar lo tradicional no sirve de nada, así como abrazar acríticamente lo más novedoso tampoco.

Además considero que, si bien me parecen muy útiles y necesarias las herramientas virtuales y las redes sociales, a veces nos podemos pasar y afectar el proceso cognitivo de los estudiantes llenándolos de foros, participación en redes, aplicación de herramientas para sintetizar información (que a veces se hace mejor con lápiz y papel), etc.

De esta forma, crítica va, crítica viene, llego a la conclusión que innovar es totalmente necesario y posible; adecuar nuestra labor a los estudiantes y su realidad, también; conocer y saber aplicar la totalidad de teorías del aprendizaje y enfoques didácticos, indispensable. Pero con criterio, con un plan, con mesura y, sobre todo, apuntando al aprendizaje.

Toda clase puede ser poderosa si se plantea desde el conocimiento disciplinar; desde el respeto a los estudiantes; desde la ilusión docente; desde la empatía; desde la simpatía; desde la no rutina, en fin...

Mi clase revisada tiene algo de ese criterio que propongo, pero también algo de incorporar teorías y enfoques didácticos a todo vapor... pero eso está bien para esta ocasión, para ver cómo los pondríamos en juego y si los podemos utilizar. A la pregunta de si es verdaderamente aplicable... no estoy muy segura de qué respuesta dar... espero que sí.



Aquí el link donde encuentran todo el análisis realizado.









viernes, 12 de abril de 2019

Cuando las nubes no son de tormenta... sino de conocimientos y felicidad.


Aunque al releer respecto a teorías de aprendizaje y enfoques metodológico-didácticos me di cuenta (otra vez) que me cuesta incorporar ideas y prácticas novedosas que me acerquen más a los "trendig topics" de la enseñanza, en este caso no me sentí frustrada o desalentada. Todo lo contrario, me di cuenta que avanzo a pasitos cortos, pero firmes.

Entiendo que sería poco realista esperar que, tras un par de procesos formativos, sea capaz de cambiar completamente la forma en la que desempeño mi labor docente desde hace varios años, agregando a mis clases y aulas virtuales todas las herramientas aprendidas, una perspectiva basada enteramente en un posicionamiento pedagógico centrado en el constructivismo y el conectivismo que se manifieste en un aprendizaje totalmente posicionado en el descubrimiento y las actividades.

No obstante, sí observo que he ido apropiando algunas de las herramientas aprendidas y que mi actividad como profesora incluye pinceladas de las corrientes más actuales que, de a poco, me alejan de procesos más parecidos a los que viví como estudiante y me acercan a la docente que busco y quiero ser.

No creo que estas reflexiones impliquen conformarme. Eso es algo en lo que he estado pensando mucho durante este módulo y he llegado a la conclusión que, de acuerdo al saber popular, chi va piano, va sano e va lontano...

Es por eso que mi nube busca expresar mi estado de ánimo respecto a este proceso y, aunque mirándola con sentido crítico tiene muuuuuchas palabras y eso la torna un tanto confusa (lo tendré en cuenta la próxima vez), me gusta.

Aquí mi enorme y feliz nube de palabras.





domingo, 7 de abril de 2019

De la memorabilidad de una clase a la anticipación de un entorno virtual de aprendizaje. Un camino de conocimiento que lleva al recuerdo y a la reflexión.


Tener que identificar una clase memorable me llevó por un recorrido interno que transitó desde el presente más inmediato, hasta momentos dulces de mi infancia y adolescencia. Pasé de pensar en el contenido de las unidades que estoy abordando en estos días junto a los estudiantes, a traer al presente mis juegos "a la maestra", las listas de alumnos con nombres inventados escritos con la letra cursiva redonda y bien trazada de los ocho años, las "planificaciones" de tareas que copiaban aquellos cuadros que prolijamente con regla y escuadra veía hacer a mis maestras, las sensaciones que me quedaron de aquellos "profes" a quienes admiré durante mi paso por las aulas del secundario y la facultad y la maravillosa sensación de aquellas clases en que sentí que había sido "la mejor docente que podía y sabía ser".

Recuerdo aquellas sesiones en que compartir un tema con los estudiantes fue una verdadera experiencia pedagógica significativa porque incorporaron los nuevos conceptos y categorías de análisis con fluidez a su propio vocabulario, porque desarrollaron actividades que contribuyeron tanto a construir saberes como a generar verdaderos grupos de trabajo, porque lograron expresarse sin nervios, vergüenza o temor a equivocarse.

Y ahora, frente al desafío de buscar tales experiencias por medio de entornos virtuales de aprendizaje me encuentro igual de ilusionada y ansiosa que aquellas tardes en que sentaba a mis muñecas para enseñarles que "M" y "A" suenan "MA".

Resultado de imagen para niña jugando a la maestra dibujoEntiendo que este entorno debe combinar y organizar aquellos elementos necesarios para lograr procesos de enseñanza - aprendizaje eficaces y de calidad, lo que se consigue articulando los elementos materiales y aspectos subjetivos implicados en esta experiencia.

Así la instrucción se concibe no solo como un proceso sino como un sistema de procesos articulados e interrelacionados de análisis, diseño, producción, desarrollo y evaluación de competencias, contenidos, estrategias de enseñanza - aprendizaje y actividades evaluativas para facilitar la adquisición de conocimientos y habilidades.

Resultado de imagen para dibujo mujer computadoraEn este sentido es imprescindible desarrollar un adecuado análisis de los componentes de ese diseño instruccional, es decir, intentar conocer lo más fehacientemente posible a los estudiantes a los que va destinado; establecer claramente los resultados a los que se pretende arribar; identificar, secuenciar y organizar los contenidos oportunos y significativos; diseñar cuidadosamente las actividades a realizar; generar las tareas didácticas digitales que resulten apropiadas y motivantes; determinar las formas de comunicación; establecer los modos y criterios de evaluación que se adecuen al proceso desarrollado y ser cuidadosos y realistas en cuanto a los tiempos requeridos, los esfuerzos a realizar, los espacios en que todo se va a poner en práctica y la carga de trabajo que se va a proponer.

Por último, pero no por eso menos importante, es preciso tener en cuenta que la tutorización resulta central. Es el acompañamiento que se da a los estudiantes, la motivación que llega en momentos de duda o desesperación, la mano que se tiende para estar presentes a la distancia.

En fin, cuanto más lo pienso y lo estudio más recuerdo las planillas de planificación que realizaban mis maestras con sus biromes de trazo fino, su regla apoyada en la escuadra para dibujar líneas perfectas y sus ojos en nosotros, mirando más allá, pensando en lo que teníamos que aprender, en cómo lograrlo, en lo que nos iba a servir, en cómo nos íbamos a divertir...

Les dejo estos recuerdos y el link con la infografía, que resume, de manera actual, rápida y directa los conceptos que me llevaron del pasado al futuro.


martes, 2 de abril de 2019

Más aprendizajes, más oportunidades, otra vez juntos.


Volvemos al ruedo... algunos nos conoceremos de otras experiencias y otros compartiremos por primera vez.


Ver las imágenes de origen
Me presento y cuento un poquito de mí.

Mi nombre es Soledad Zumer, soy politóloga y administradora pública... pero me desempeño como docente. Eso es lo que me gusta hacer, desde pequeña. No recuerdo haber jugado mucho a otra cosa que "a la maestra" y día a día descubro que allí, entre estudiantes, apuntes y computadoras está mi verdadera vocación.

Mi centro de operaciones es la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo, lugar al que entré por primera vez con 16 años y del que, desde ese momento, no me fui más. Soy profesora titular de Teoría del Estado y Políticas de Comunicación, de la carrera de Comunicación Social, y JTP de Administración General en la carrera de Ciencia Política y Administración Pública. Además me desempeño como Tutora de quienes retoman sus estudios luego de años de haberlos dejado, de formar una familia, de haber pasado por algún momento difícil, en fin de un sinnúmero de cosas lindas y de otras no tan buenas que los apartaron y demoraron en su camino estudiantil.

El recorrido de este curso lo voy a transitar con mis estudiantes de cuarto año de Comunicación Social, siguiendo la asignatura Teoría del Estado y Políticas de Comunicación, que se desarrolla en el primer cuatrimestre. Es un espacio curricular extenso, que incluye tres áreas temáticas complementarias: la problemática polítológica referida al Estado y al régimen político democrático, las regulaciones estatales a la comunicación y el derecho comunicacional.

Como pronto estaremos en la unidad 3, voy a relacionar las actividades de este módulo con ella, es decir, con la democracia. El año pasado desarrollé una clase muy linda, memorable, respecto a los primeros temas de esa bolilla. Esa base, junto a alguna que otra idea nueva, forman lo que aquí les presento.
 
https://drive.google.com/file/d/1r6o5VKL_OyVVSP_Y-ZEB5pFsYyRNzoOf/view?usp=sharing

Espero les guste y aporten sus enriquecedores comentarios.

¡Buen camino!